Bajo deseo sexual: inapetencia sexual hacia la pareja. Esta dificultad suele afectar a la calidad de vida de la persona que la padece o a la de su pareja.
Trastorno por aversión al sexo: se rechaza cualquier contacto o cualquier actividad relacionada con el sexo. Los pacientes se quejan de ansiedad, miedo o disgusto en relación con las situaciones sexuales.
Ambos trastornos son más frecuentes en mujeres que en hombres.
Trastorno de la excitación sexual en la mujer: la antiguamente llamada frigidez, consiste en la falta de respuesta adecuada ante un estímulo sexual.
Trastorno de la erección en el hombre: la mal llamada impotencia, que actualmente describimos como disfunción eréctil
Trastorno orgásmico femenino: imposibilidad para conseguir el orgasmo.
Trastorno orgásmico masculino:
Dispareunia: dolor durante la actividad o la relación sexual (coito)
Vaginismo: dificultad o imposibilidad de penetración por espasmo de los músculos vaginales que guardan la entrada.