La principal sustancia psicoactiva del cannabis es el tetrahidrocannabinol, conocido como THC. Se tiene una concepción errónea acerca de los efectos que produce esta sustancia, se piensa que no genera dependencia y que se puede controlar y no es así. Es una sustancia como otras altamente adictiva.
Cuando la consumo a diario y cada vez lo necesito más, así como cuando dejo de hacer cosas que antes sí hacía. En esta sustancia se produce el efecto conocido como “síndrome amotivacional” donde se va produciendo cada vez en mí más desinterés hacia todo lo que me rodea, incluido las actividades sociales.
Dentro de los efectos psicológicos que puede producir el consumo de cannabis está el enlentecimiento de mi memoria a corto plazo, de la atención y el tiempo de reacción, así como la dificultad en expresarse, en
la claridad mental y el deterioro en la capacidad de concentración. Es por ello por lo que se rinde peor tanto a nivel escolar como laboral.
Los efectos fisiológicos que produce el cannabis son aumento del apetito, taquicardias, sudoración, descoordinación de os movimientos.
En muchas ocasiones se tiende a negar estos efectos cuando alguien nos los dice, es porque bajo los efectos no soy consciente de lo que me está sucediendo.